domingo, 23 de mayo de 2010


SENDERO RIO DE LA MIEL ALCECIRAS
23 de Mayo de 2010
DISTANCIA: 5 Km. Aproximadamente ida y vuelta.                       
Tiempo: 4 Horas.
Hace más de cuatro años estuvimos por primera vez en el maravilloso Río de la Miel y a parte de muchos recuerdos grabados en la retina, estupendas estampas para no olvidar, hay algo muy particular que queda impregnado y que es como su nombre indica el penetrante olor a miel que durante todo el recorrido nos acompañará.
El sendero tiene un trazado lineal y empieza en la barriada algecireña de El Cobre, después de llegar a la calle “Maestra María Luisa” en un pequeño desvío a la izquierda pero antes desayuna en el “Bar El Cobre”, tostada con aceite y jamón y buen café.
Después de leer el panel informativo, atravesamos una cancela que impide el paso de vehículos no autorizados y circulamos por una pista que nos conduce a un cruce de dos caminos nosotros tomamos el de la derecha el de la izquierda nos llevaría a la “Senda de los Presidiarios” que dejamos para otra ocasión.
A medida que avanzamos la vegetación se hace más densa y a parte de un frondoso alcornocal, lentiscos y acebuches nos sorprende el porte de algunos helechos con miles de formas y colores intensos.
Pronto llegamos al molino “Escalona” que todavía funciona y nosotros atravesaremos por un puente de estilo medieval para poco a poco quedarnos maravillados al introducirnos en el “canuto” que va formando el río.
El sendero es muy claro sin pérdida ninguna, siempre paralelos al río a través de una exagerada y exuberante vegetación que nos hace sentirnos en una auténtica selva.   
La cara de satisfacción con la que nos miramos dice todo de este lugar, entrañable, acogedor, espectacular y caminando sin dejar de hacer fotografías llegamos al “Molino del Águila”, se encuentra en ruinas abandonado, pero tiene una especial estructura que subimos para poder contemplar un doble caos o canal, movería dos piedras en lugar de una.
Paramos para un pequeño descanso en lo que debió ser el huerto, sin dejar de oír el murmullo del agua y el canto de las aves.
Llegaremos a una gran cascada protegida por grandes rocas que vuelcan sus aguas sobre una gran poza de color verde o azul depende de cómo brille el sol, el lugar es idílico, “quietos sin rechistar” nos quedamos un buen rato.
Decidimos adentrarnos un poco en la zona de especial protección con el máximo de sigilo y cuidado, llegamos a una pequeña chorrera de piedras negras y otra magnifica poza.
Las raíces de los árboles (alisos), el musgo en las rocas, las lianas y entroncadas enredaderas nos impresionan el lugar es simplemente maravilloso.
Los helechos son magníficos mas todavía que los que habíamos visto hasta ahora, se nota que esta zona es menos transitada.
En fin gratamente sorprendidos, no sabemos que hacer si seguir o volver pero sabiamente decidimos que tenemos que conseguir el permiso necesario pues esta zona no puede quedarse sin la máxima protección que le concede el Parque de los Alcornocales.
Tristes pero muy reconfortados emprendemos el camino de regreso, “hemos recargado las pilas” y después de un buen rato llegamos de nuevo al huerto del molino y decidimos parar para comernos nuestros bocatas y disfrutar del paisaje, del río, de las rocas, de la montaña, árboles, pájaros… nubes… murmullo…silencio…

domingo, 16 de mayo de 2010


SENDERO PINSAPO DE LAS ESCALERETAS
PARAUTA 16-5-2010 SIERRA DE LAS NIEVES
DISTANCIA: 5,5 Km. Aproximadamente ida y vuelta.                       
Tiempo: 3 Horas.

Hoy hemos realizado una ruta muy atractiva y con un colofón final muy espectacular. Es la primera vez que entramos en el parque de la Sierra de las Nieves, “Reserva de la Biosfera”, que abarca algunos municipios de la provincia de Málaga.
Después de levantarnos a las 7 de la mañana “de un domingo”, nos vamos a Ronda buscando la carretera de San Pedro de Alcántara, pasamos el cruce de Parauta y a 2,5 Km. se encuentra el desvío de este Parque.
Una pista forestal en buen estado nos llevará hasta nuestro destino, perfectamente señalizado.
Hemos dejado el coche en un cruce a 2,4 Km. aunque se puede acceder por la pista, merece la pena disfrutar caminando en una suave pendiente, aunque ya nos encontramos a 1.500 metros de altitud
Son sierras con fuertes pendientes, que dan lugar a valles muy profundos y grandes barrancos, precipicios y desfiladeros. El punto más alto es el Pico Torrecilla, de 1.919 metros de altitud. El modelado kárstico de estas montañas hace también que abunden grutas y simas entre las que destaca la llamada GESM que tiene unos 1.100 metros de profundidad.
El clima mediterráneo, con gran influencia oceánica, cosa que hemos podido comprobar pues llegamos con el sol brillante, pero con bastante frío, permite una gran variedad de vegetación, destacando unas 3.000 hectáreas de pinsapar, (como 3 veces la ciudad de San Fernando) así como quejigos, encinas, alcornoques y pinares.
Durante todo el camino Pinsapos donde miremos nos acompañan a nuestro destino.

La fauna característica de estas montañas incluye poblaciones de cabra montés, corzo, “hemos tenido también la suerte de verlos en dos ocasiones” jabalí, incluso el gato montés y rapaces como el águila (real, perdicera y calzada) que hemos podido disfrutar de su presencia y el halcón peregrino.
Posiblemente el pinsapo que hemos visitado es el de mayor tamaño y entidad de cuantos existen y no solamente en la Sierra de las Nieves. Está dentro del término municipal de Parauta. Tenemos que aprender a ver más allá de lo que nuestros ojos pueden ver, ¿Cuántas cosas no habrá visto este árbol? Y reclinados sobre el, con una sensación de paz indescriptible, pensamos en las tormentas, rayos y truenos, incendios, incluso la tala del hombre para fabricar barcos todo lo que ha soportado este abuelo de los bosques.
Tiene un perímetro de 9 metros en la base, una altura de más de 26 metros, da más de 400 m2 de sombra y se le calcula una edad entre 400 a 550 años.
Todo esto muy bien, pero hay que verlo para entenderlo, el bosque que atravesamos para llegar es sorprendente, majestuoso, parecido pero diferente a nuestro Pinsapar de Grazalema. No quiero saber porqué me gustan tanto estos bosques, creo que es porque huelen a duendes.
En el panel informativo se cuenta una bella historia que este árbol también tiene: “Este pinsapo creció como faro y guía de los caminantes, en el mismo sitio donde fuera enterrada una señora del lugar cuya bondad y hospitalidad con los transeúntes era motivo de veneración entre los que la conocieron”.
Debemos seguir luchando sin desfallecer aunque todos abandonen y cuidar de estos bosques a pesar del cansancio o de la enfermedad es lo que podemos aprender contemplando este PINSAPO DE LAS ESCALERETAS.